En el contexto de la inmediatez y de la falta de barreras en el acceso a la información, nuestro mayor desafío es reconvertir nuestro rol de profesores. Debemos generar un nuevo rol que permita jerarquizar y validar la información. Es que pasamos de viajar por una "ruta del conocimiento" de una solo mano con una velocidad máxima de 80 km/h, a una compleja autopista con varias manos y con muchísimos salidas y entradas. A lo que se suma una enorme cantidad de "carteles que nos ofrecen información" en nuestra marcha de más de 130 km/hora. En esa marcha debemos discernir si esos carteles son correctos, si nos llevan a buen destino... Como profesores debemos ayudar en esa marcha, validando carteles, ayudando a que nuestros alumnos no excedan la velocidad y saquen conclusiones incorrectas o tomen por caminos inadecuados.
Es muy importante la selección de fuentes confiables y precisas al momento de realizar la búsqueda bibliográfica académica.
ResponderEliminarSaludos!
Es cierto que existen una gran cantidad de distractores y fuentes no confiables de información, a disposición de los alumnos, es nuestra tarea como educadores, no sólo ofrecerles una correcta ayuda en la búsqueda bibliográfica, sino también a reconocer aquellas fuentes que no son confiables para su consulta.
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